Familia Castillo de Canena

Castillo de Canena

Somos una empresa familiar vinculada al mundo del aceite de oliva desde 1780

Más de dos siglos de historia y de aprendizaje como elaboradores de aceite de oliva en los que, sumados a un firme compromiso con la sostenibilidad, la innovación, la calidad y la excelencia, hemos logrado convertirnos en líderes mundiales en el sector del Aceite de Oliva Virgen Extra premium.

Somos los hermanos Rosa y Francisco Vañó y en 2003, siendo por entonces altos directivos de compañías multinacionales como Coca-Cola y Banco de Santander, decidimos cambiar nuestros rumbos profesionales y embarcarnos por completo en el proyecto de transformar la empresa familiar de producción de olivar y fabricación de aceite de oliva, comercializado como aceite a granel, en un nuevo Castillo de Canena: una compañía moderna, enfocada a la creación de una marca de AOVE de alta gama con un alto espíritu de innovación.

Olivar

Presencia en 60 países

A día de hoy

Producimos con el mayor respeto por la tierra en la que nacen nuestros olivos, de manera totalmente sostenible. La pasión por lo que hacemos nos mueve a querer ofrecer a nuestros consumidores, no solo la mejor calidad en productos tradicionales de AOVE premium, sino también otros productos en base a nuestros AOVEs que se materializan en propuestas gastronómicas muy innovadoras que suponen un valor añadido único e invitan a descubrir nuevas experiencias culinarias.

Monumento Artístico Nacional en 1931

Castillo renacentista

Declarado Monumento Artístico Nacional en 1931

Castillo de Canena es, ademas, el nombre de nuestra casa familiar. Un castillo renacentista situado en el pueblo de Canena, Jaén, que atesora una historia singular. Fue construido por la tribu árabe Banu Kinana sobre las ruinas de un asentamiento romano. Más tarde, bajo el mando de la orden militar de Calatrava, formó parte del cinturón de fortalezas defensivas durante la Reconquista, un conjunto de castillos denominados los «adelantados», que fueron frontera con el reino árabe de Granada durante más de 200 años.
Finalmente, en 1538 el secretario del emperador Carlos V, Francisco de los Cobos, lo convirtió en un Castillo-Palacio de la mano del prestigioso arquitecto Andrés de Vandelvira.
Declarado Monumento Artístico Nacional en 1931, es de uso exclusivo de nuestra familia, clientes y amigos, aunque puede visitarse los lunes por la tarde o bien previa reserva cualquier otro día de la semana.